Disgregatio 68: "ANEGADA"

Tras varios días de niebla ha llegado la lluvia. Llegado y arrasado . Está diluviando. Hace un rato tuve que sacar a Nerón y me puse pingando. Vaya, me salta el corrector , éste, el automático. Pues pingando existe, al menos por aquí se dice mucho. Bueno, es lo mismo, me calé. La tarde negra como un grillo, con un mundo de tareas domésticas por hacer. ¡Un planazo, vamos! Y entonces, veo parpadear la lucecita que indica que se está utilizando el wifi. ¡Ya está el vecino bajándose películas guarras! La verdad nunca me ha preocupado  que se enganche a mi red, total, pago tarifa plana y apenas uso "el internet"... Pero la diablesa, esa que habita en mi, me ha pellizcado y  lo he desenchufado. Y, san periquitín me perdone,  he reído, así, con risa malvada ¡Jiiijiiijii!  Quizá el ambiente navideño comience afectarme. Es extraña una Navidad sin pedacitos de hielo en las puntas de las púas de los pinos. No entra en mi comprensión. Tampoco comprendo lo de los microchips y todo eso, me parece alucinante  que en cositas tan diminutas quepan tantísimas cosas grandes. 

Si, llueve a dolor.